16/5/09

Su casa bordeando la autopista, hizo que ella creciera muy deprisa. No quise conocerla de aquel modo, si quieres comprar algo tengo todo. Y pocas veces sonreía, pero con eso a mí me valía. No quise acompañarla en aquel vuelo porque apenas pisábamos el suelo, y antes que nuestro tren descarrilara en marcha me bajé sin decir nada.
En otro tiempo me gustaba cuando en su mismo barco viajaba, yo viajaba.
La ví en un bar de aquellos que frecuenta, estaba de negocios en la puerta y comprendí que nada había cambiado, ojalá nunca la hubiera encontrado.
Te juro que era buena chica, aunque con poco apego a la vida.
Y pocas veces sonreía, pero con eso a mi me valía.
Refleja un estado de ánimo de amistad y amor. Dos de nosotros, compartiendo cosas íntimas que quizá también sólo nosotros podamos disfrutar. Nos unen los recuerdos y también los bellos momentos que vivimos. Una compañía es indispensable para nosotros en todo momento. La melodía es fresca, cantada a dúo con guitarras acústicas que marcan un ritmo como de marcha o galope de corazón que nunca se detiene mientras tengamos a esa persona especial, amigo/a, novio/a junto a nosotros construyendo caminos de la mano.
Porque me da igual lo que piense mi alrededor, no saben lo que siento sin ti. Tú eres el lugar en el que quiero estar, sé que es difícil de explicar así que mejor siéntelo. Y pasan los días, aunque quiero que sean contigo, siguiendo este camino me llevó hasta ti el destino, y no paro de pensar en ti. Sin ti, mi mundo muere en un sueño de papel sin fin, sentir cómo se detiene el tiempo. Tú eres mi principio que nunca tendrá final, cierro los ojos para ver esta realidad lejana, cómo la distancia que nos separa en el tiempo, lo siento si sufrí sin ti en este amargo silencio, no hay día que no piense en ti.